Acaba de aparecer el cuarto número de la Revista “ Pensamiento Propio”, una publicación que incluye en sus páginas desde la enjundia de los pensadores invitados hasta la poesía joven. Son ediciones de excelente calidad e interesante temática. Su blog
http://revistapensamientopropio.blogspot.com/
La revista PENSAMIENTO PROPIO busca rescatar y fortalecer pensamientos, conocimientos, sentires y expresiones artísticas de los pueblos del continente, poniéndolos al servicio de las grandes mayorías.
El sociólogo Jorge Avila fue invitado a una amable conversación sobre la actividad que desarrolla la publicación que dirige. Describe sus propósitos, al sostener que intentan “ construir una mirada de la realidad latinoamericana que a la vez reformule la propia manera en que la miramos. No es sólo cambiar las respuestas, sino las preguntas mismas ”. En su particular visión sobre lo que constituye su preocupación profesional, describe su accionar: “ estamos, recuperando lo que siempre ha sido nuestro: el poder, la capacidad de hacer cosas juntos, de ejercer nuestra soberanía, también la intelectual ”.
Resulta gratificante la conversación sostenida con Jorge Avila, la que transcribimos con mucho agrado:
L.MARTIN.- Preguntamos : ¿ Por qué “ pensamiento propio ” ? ¿ propio de quiénes ?
JORGE AVILA.- Bueno, es claro que el nombre de nuestra revista constituye todo un concepto. Es, por cierto, un concepto dinámico, y en cuanto tal está en disputa.
Desde pequeños se nos enseña, por ejemplo, la historia y la literatura latinoamericanas bajo patrones racionalistas muy propios de las sociedades que han alcanzado mayores niveles de desarrollo industrial. Pues bien, cuando decimos “pensamiento propio” nos referimos no sólo a la formación de “ideas latinoamericanas”, sino también al desarrollo de una forma propia de producir esas ideas, de producir significados, comunicación humana. El racionalismo, tan característico de la sociedad industrial, es después de todo una matriz importada en América Latina, como también lo es el conjunto del modo de vida industrial moderno. Sin embargo, el desarrollo de nuestras sociedades cuenta no sólo con recursos naturales para ese modo de vida importado, sino también con tradiciones de pensamiento, conocimiento y creatividad particulares, y que se expresan no sólo en la exposición académica de reflexiones y análisis “objetivos” de la realidad.
Es en esa conversación que intentamos desarrollar nuestra revista, la de construir una mirada de la realidad latinoamericana que a la vez reformule la propia manera en que la miramos. No es sólo cambiar las respuestas, sino las preguntas mismas.
L. MARTIN.- ¿ Existe un equipo de redactores permanentes de la revista, o está abierta preferentemente a la recepción de colaboraciones ?
JORGE AVILA.- No existen colaboradores definidos como permanentes, pero hay varios que han colaborado en más de un número con algún trabajo. Nos interesa, sobretodo, abrirnos a los aportes que diversos actores puedan hacer a la conversación que intentamos promover, no sólo desde la reflexión y conocimiento formal ( académico, disciplinario ) sino también desde la sabiduría medicinal ancestral que poseen los pueblos indígenas del continente, por ejemplo.
L. MARTIN.- ¿ Quiénes forman el Comité Editorial y qué orientación o características los identifican ?
JORGE AVILA.- Participamos de revista “ Pensamiento Propio ” compañeros y compañeras de distinto origen y trayectoria. Nos une el interés por desarrollar una reflexión y pensamiento crítico que se proponga colaborar a la democratización del conocimiento y a la formación de un pensamiento soberano, para y desde América Latina.
L. MARTIN.- ¿ Cuál es el ámbito de distribución de la publicación ? ¿corresponde al territorio nacional o circula también en otros países de América Latina ?
JORGE AVILA.- La revista, tanto en su Consejo como en su Comité Editorial, cuenta con personas de Bolivia, Perú, Argentina y Chile. El último número, el 4, se imprime en Bolivia, Argentina y Chile, y desde este último se envían ejemplares a Perú, hasta que tengamos capacidad de imprimir allá también. Distribuimos también algunos ejemplares en Europa.
L. MARTIN.- La revista publica desde la enjundia de los pensadores invitados hasta la poesía joven; por ejemplo lo que sucede en el número dos de la revista ( “ Gracias a un error de Engels y Marxs? Sobre el problema de las nacionalidades y el marxismo”, de Iñaki Gil de San Vicente… o la poesía de Lucía Mariana ) ¿ cómo se estructura el contenido de cada número de la publicación ? ¿ a qué obedece la agenda temática de las ediciones ?
JORGE AVILA.- Por lo pronto nos ha interesado abarcar diversas temáticas, todavía un poco experimentalmente, pero a medida que hemos ido avanzando vamos perfilando y precisando mejor la idea de revista que queremos desarrollar: nos interesa estimular el pensamiento soberano sobre los problemas ( sociales, políticos, económicos…) que afectan a nuestro continente, pero también nos preocupa el desarrollo de propuestas, de respuestas a las preguntas que nos hacemos. Ello porque en América Latina hemos desarrollado respuestas particulares a los desafíos que la historia nos va presentando. Así, por ejemplo, entendemos que la democracia no es ( no debe serlo ) una cuestión circunscrita sólo a las regulaciones y procedimientos para elegir autoridades y representantes. En toda sociedad, en las nuestras, hay una serie de problemas que ameritan una decisión democrática para otorgar de la legitimidad necesaria a las decisiones que se toman. Por ejemplo, la explotación y uso de nuestros recursos naturales y, en general, de la riqueza que producimos. O el cómo manejamos nuestros ahorros previsionales. No es admisible que las decisiones sobre estas materias estén dominadas por las lógicas del mercado. Lo que hagamos con nuestro patrimonio debe ser materia de una decisión de la sociedad en su conjunto, y no sólo efecto de las negociaciones a las que arriben los representantes electos y sus contrapartes privadas.
L. MARTIN.- El editorial del cuarto número de la Revista es un recuerdo de profundo sentimiento y admiración a Carlos Liberona Vergara, fallecido prematuramente el 11 de junio pasado. Se incluyen sus frases llenas de sabiduría, con un anticipo congruente del comportamiento latinoamericano. Pero, como en el propio texto se menciona, Carlos no alcanzó a ver el “ ensayo ( de ) un nuevo golpe en América Latina, ahora a través de la traicionera oligarquía hondureña” ¿ aspiración del hombre de que estos hechos no se repitieran tan pronto en la convivencia ciudadana o confianza en la necesaria madurez de las democracias ?
JORGE AVILA.- Carlos era, sin duda, un hombre sabio, no un erudito, sino un hombre que aprendió a conocer el comportamiento humano y su inspiración. No creo que haya confiado en la madurez de las democracias, la ingenuidad no era lo suyo. Sí confiaba profundamente en la capacidad que tienen los pueblos para sobreponerse a las dificultades a que se ven enfrentados. Confiaba en la capacidad de resistir de los pueblos, y esa confianza, sin duda, transmitía seguridad y esperanza a quienes trabajamos con él.
L. MARTIN.- Carlos Liberona integró el Comité Editorial, y su particular pensamiento orientó no tan sólo el trabajo inicial, sino que la actividad continuadora de la revista PENSAMIENTO PROPIO… ¿cuál fue su relación humana con el grupo de colaboradores, su vida anecdótica en el trabajo de estructuración de cada número de la publicación ?
JORGE AVILA.- Carlos no sólo integró el Comité Editorial, lo fundó. Fue él quien nos convocó a un grupo diverso de personas, hasta consolidar al equipo que ha venido desarrollando este proyecto.
Carlos convocó a quienes creía podíamos llevar adelante esta tarea. Él tenía profunda confianza en las generaciones más jóvenes, y quienes trabajamos en Pensamiento Propio somos, en buena parte, de la generación que sigue a la de Carlos. Sin duda él envejeció más rápido que su pensamiento y su energía. Era un hombre amable, hábil y observador, con una sonrisa que delataba su “picardía chilena” y buen humor. En mi opinión, fue esa actitud, de jovialidad y de convicción a la vez, la que marcó la relación de quienes le conocimos.
L. MARTIN.- Sabemos que usted es sociólogo, especializado en cuestiones de democracia; nos agradaría conocer antecedentes curriculares suyos, además de su visión respecto del trabajo editorial que dirige y las manifestaciones propias de su expertizaje.
JORGE AVILA.- Ingresé a Sociología justo cuando se acababa la dictadura militar en Chile. Fue la respuesta que tuve ante lo que consideré el gran y larvado fracaso de la izquierda chilena. Mi evaluación de lo que en Chile se llamó ( hasta gastarla ) “la transición” era lapidaria: Lampedusa se la perdió. El tiempo lo ha mostrado: en Chile los ciudadanos deciden sus representantes y autoridades, pero nada más. Y decir “ deciden sus representantes y autoridades ” es una concesión gigantesca ( considerando las irrisorias reglas del juego electoral chileno, y la onerosa industria económica que representan las campañas ).
Ya luego me interesé más específicamente por la Ciencia Política, por lo que realicé un magíster en la Universidad de Chile. De allí me ha interesado desarrollar temáticas vinculadas a la democracia y la calidad del sistema político. La democracia es, a estas alturas, un patrimonio de la humanidad; el punto está en cómo hacer que ésta sea real, y no un mero ejercicio de legitimación de las decisiones que toma una elite minoritaria. Si hasta del concepto de democracia se han apropiado las elites dominantes.
En eso estamos, recuperando lo que siempre ha sido nuestro: el poder, la capacidad de hacer cosas juntos, de ejercer nuestra soberanía, también la intelectual. De allí que agradezco tu entrevista, que nos permite explicar nuestro proyecto e invitar a quienes quieran colaborar a derrumbar el poder de las falsas ideas.
Leopoldo Martin Ramos. Chile.
